El árbol está en un gran parque, el Parc Güell, visitado cada día por miles de turistas. Los niños se encaraman por el viejo tronco muy inclinado. Cuando yo era niño -y no nos visitaban los turistas- jugábamos por el parque y subir por el viejo tronco era otro de los juegos. Según lo recuerdo, ya era así entonces, hace 45 años.